La iluminación eficiente se consigue por medio de equipos que permiten variar los niveles de iluminación de cada recinto en función de la luz natural recibida, así como mediante detectores de presencia en zonas de paso, como zonas comunes o garajes en los edificios, para que sólo se enciendan las de dichas zonas donde se encuentren los ocupantes.
Regular la apertura y cierre de dispositivos de protección solar como persianas, toldos y cortinas para conseguir el mejor aprovechamiento posible de la radiación solar recibida a través de los huecos